viernes, 14 de marzo de 2008

Meatloaf

No, no hablo del cantante rock de mi niñez, (aunque para los fans, he aquí su página), sino del pastel de carne, plato maternal por excelencia, al menos en esta parte del Atlántico. Como mi madre viene de ultramar, para mí esta receta no conlleva ningun tipo de evocación de la infancia (es más bien el bacalao :-). Pero aquí se considera la "comfort food" por excelencia. En una entrada anterior podéis encontrar lo que se considera como comida reconfortante en Canada. Sigo sintiendo curiosidad, aunque nadie se haya animado a escribir: ¿Sugerencias sobre lo que vosotros consideráis como reconfortante?

El caso es que hice uno, cual madre canadiense veterana. Todo un éxito. Qué contraste, ayer haikus y hoy, meatloaf. Empieza a estar claro que si lo que buscáis es alta cocina, deberíais estar leyendo otro blog. El pastel de carne tiene un no se qué de mal gusto (y no hablo del sabor, está sorprendentemente bueno), de comida de niño, efectivamente, por lo blando y alimenticio: carne, patata. La palabra que define mejor este plato es satisfactorio. Si tenéis que arar un campo de maíz entero con las manos, o algo así :-), os recomiendo cocinar uno para cuando terminéis la jornada.


Yo utilicé al menos tres zanahorias ralladas, y bien de apio, cebolla y ajo picados. Si tenéis un robot de cocina, aún mejor, (esto es cocina USA, fácil y expeditiva, admite maquinaria pesada), metéis las verduras, las picáis bien, y a continuación añadís lo demás (huevo, pan, carne). Las madres más aguerridas lo amasan todo con las manos, pero no es estrictamente necesario. Sobre todo si os ve alguien que va a sentarse a comerlo.

Parece que los orìgenes de este plato son humildes, durante la Gran Depresión se mezclaba la carne con verduras y pan para "estirarla", cuando no había mucha.
La presentación es importante, especialmente lo de servir el puré de patatas con una cuchara de helado. Es lo que le da el toque cafetería de colegio. Cuando enseñaba en la escuela primaria me di cuenta de que el puré de patatas en forma de bola era lo más importante de este plato :-).

He aquí la receta. La maman que me dio la que utilizo normalmente lo hacía un poco diferente (cada maman tiene su receta, imagino). Ella utilizaba pedacitos de miga de pan, en lugar de crackers, lo barnizaba con ketchup, en lugar de sopa de champiñón en lata, y en lugar de las especias (aunque lo del curry suena genial, lo voy a probar la próxima vez), usaba un poco de salsa de soja y Worcestershire mezcladas. En Wikicookbook dan al menos cuatro versiones, echadles un vistazo y elegid la vuestra.

Después de comerlo, os entrarán ganas de sentaros en una mecedora en el porche y hablar de los resultados de la liga de béisbol.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Pues para mi reconfortante lo que se dice reconfortante, es el Cola Cacao. Por spuesto asociado a la niñez. O ¿acaso no hay nada más reconfortante que la niñez, donde siempre tenías a una madre ( o su regazo) en las proximidades?

Arantza dijo...

Querido anónimo, tu nostalgia asociada al Colacao es la nostalgia más común entre los españolitos exiliados en Montreal que conozco, que son muy pocos. Curioso, a mí me gusta, pero no lo echo tanto de menos. Y se puede encontrar, aunque a 6$CA. el bote (escandaloso). Yo sueño más bien con galletas Príncipe, y las palmeras de chocolate de tienda de chuches.(Suspiro).